Fruto

Concepto para el videojuego en el marco de reflexiones sobre prácticas de desinstrumentalización de la naturaleza y juegos. Me baso en un poema que escribí hace un tiempo, el producto final tiene poco que ver con el poema pero este dio pie a las reflexiones que llevaron a su producción. 

 Fruto

Hay dónde la rama no llega:

el hoyo en medio de la calle que indica un camino concreto;

es la  luz imaginada luego. 

¿Habrá algo  propio en esa luz,

en el cuerpo aún observado,

en un rostro que miente sin más

pero es acompañado?

La rama no llega al piso a menos que caiga,

se seque y muera en la calle,

un niño la lleve aunque le sea prohibido

para hacer que lucha en la plaza,

para hacer que lucha pues no tiene nada

contra qué luchar.

Me interesa la relación de los niños con la naturaleza porque es algo que casi siempre está mediado por el juego: un árbol para un niño no es un bien de producción, no ve la madera ni la tabla, tampoco el leño, el árbol no es un material sino un objeto y no solamente es un objeto sino que puede ser también un juego. En el árbol se puede trepar, se puede colgarse, etc. Cuando los niños están en mayor contacto con la naturaleza es cuando van a jugar (en el parque, en el patio, en la playa) ¿Qué les enseña ese juego?

La naturaleza, además de tener un rol en el mundo productivo, lo tiene en la cosmovisión que manejamos e incluso se introduce en dichos populares como “irse por las ramas”, en este caso me interesó pensarlo en el modo literal porque mientras que la expresión significa que una conversación puede derivarse en diferentes temas infinitamente, en la práctica, si uno realmente fuera de rama en rama llegaría a dos lugares posibles: a la copa del árbol o, si se trata de una calle arbolada (digamos… 19 de abril, buschental, otras)  se puede terminar en el centro luminoso, en el lugar dónde está el punto de fuga.  A mi esa imágen me recuerda mucho a la luz blanca al final del túnel. El imaginar que hay después también es parecido a un juego de rol. Yo hago de muerto que mira la luz, hago de persona que sigue el camino iluminado, el camino luminoso lleva al parque. 

En el parque, se propone un nuevo juego; ir a buscar la rama. Tenemos tres opciones de llegada (de finalidad) la copa, que descarto por poco interesante pero es una posibilidad, el fruto, o el punto de fuga.  Se plantean posibilidades imaginarias.  ¿con las ramas qué? ¿ Juega a que es una espada ? No, las tira, se distrae con algo más, va a jugar a otro juego, recolecta ¿otra cosa? 

El objetivo que veo en esto es evidenciar las posibilidades del juego y del pensamiento, así como evidenciar las posibilidades imaginativas de la naturaleza, poniendo el pensamiento en el lugar de acción práctica en vez de como suceso inmaterial.